Dietas vegetarianas
Licenciadas en Nutrición Analía Pagés y Patricia Piñeyro
Las dietas vegetarianas para ser equilibradas exigen un mayor conocimiento a la hora de reemplazar los alimentos no consumidos, de manera de evitar déficits nutricionales sobre todo en la infancia. Para facilitar la absorción de los nutrientes se deben tener en cuenta tanto la cantidad y la frecuencia de la ingesta de alimentos fuente, así como también las formas de preparación y la combinación de estos.
Los padres o los propios niños o adolescentes, que deciden cambiar de una dieta omnívora, por una vegetariana, deben conocer los riesgos y las ventajas de la misma y recibir información que ayude a ofrecerles una alimentación suficiente. Se debe tener claro que una dieta vegetariana no implica solo la exclusión de carnes.
Las dietas vegetarianas pueden realizarse siempre que sean planificadas por especialistas con la inclusión de una amplia variedad de alimentos vegetales y fortificados, con el suplemento adecuado indicado en cada etapa, monitoreo y seguimiento multidisciplinario del niño o adolescente.
Hay ciertas sociedades científicas (1) que consideran que teniendo un correcto monitoreo del aporte de energía, de la velocidad de crecimiento y del aporte de nutrientes que se consideran de riesgo, es posible cubrir los aportes nutricionales de los niños en etapas de crecimiento.
Sin embargo, hay otras (2) , que no recomiendan las dietas veganas para niños y adolescentes.
La alimentación vegetariana es clasificada de acuerdo con los tipos de alimentos de origen animal que son incluidos en su alimentación (huevos, lácteos, pescados, etc).
Los beneficios
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Mayor fibra dietética por el alto consumo de frutas y vegetales, prevención a corto plazo del estreñimiento y a largo plazo, cáncer de colon y diabetes Mellitus tipo 2.
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Mayor contenido de grasas de buena calidad, que disminuye el riesgo de hipertensión, hipercolesterolemia y enfermedades cardíacas.
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Prevención de obesidad.
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Mayor aporte de nutrientes antioxidantes (magnesio, potasio, vitamina C y E, ácido fólico, entre otros).
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Establece patrones alimentarios saludables para toda la vida.
Los principales limitantes de estas dietas son los siguientes:
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El volumen de alimentos que se debe consumir para cubrir las necesidades energéticas y de nutrientes.
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La menor digestibilidad de los alimentos en especial las proteínas y minerales.
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Ausencia de determinados nutrientes en los alimentos de origen vegetal.
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Costos y tiempos de elaboración y planificación.
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Los nutrientes que generan mayor preocupación por la posibilidad de déficit son el aporte proteico ante la diferente calidad biológica de las proteínas de fuentes no animales, la vitamina B12, los ácidos grasos Omega 3, el calcio, la vitamina D, el hierro y el zinc.
1| Sociedad Canadiense de Pediatría, Academia de Nutrición y Dietética de EEUU, Sociedad Italiana de Nutrición Humana.
2| Academia Americana de Pediatría, la Sociedad Alemana de Nutrición y Comité de Nutrición de la Sociedad Europea de Gastroenterología, hepatología y Nutrición.
